Si no, no se preocupe, hoy vengo a sugerirle dos de los filmes nominados a Mejor Película que podrá ver antes de la entrega.
Comenzaremos con la película “Los descendientes” (The Descendants), estelarizada por George Clooney. Toda la historia se envuelve alrededor de un trágico accidente, que hace que Matt King (Clooney) revalúe su rol de padre y su forma de cuidar la tierra, dejada por sus ancestros de origen hawaiano.
Se demuestra una buena actuación por parte de Clooney; el escritor del guión, sin duda, pensó bien en diferentes reacciones ante el duelo; y hay unos paisajes hermosos para observar. Sin embargo, se pudo haber omitido mucho del vocabulario explícito y vulgar de las dos jovencitas que hacen el papel de las hijas de Matt King, que después de un rato ya había perdido la cuenta de cuánta palabrería dijeron.
Con una duración de 115 minutos, los acontecimientos mueven al público a pensar: ¿qué haría yo en el lugar de Matt? Entre tanto dolor, también hay suficientes comentarios o momentos cómicos que dan alivio a la temática transcendente.
Otro largometraje es “El Artista” (The Artist). Con 10 nominaciones para los premios Oscar, y ya otros galardones ganados, esta película le demuestra a todo Hollywood que no se necesitan de avanzada tecnología, violencia o escenas eróticas para crear una maravilla.
Todo el filme se desenvuelve a finales de los años 20 y principios del 30, cuando las películas mudas empiezan a perder su vigor. Los roles principales, interpretados por Jean Dujardin (de origen francés) y Bérénice Bejo (de origen argentino y francés), son dos famosos actores, quienes al pasar de los años entablan una amistad evolutiva, a pesar de varios sucesos tanto personales como profesionales. Aunque quizás no reconozca a los protagonistas, sus habilidades de mostrar emociones y cautivar a la audiencia son excepcionales.
Queda importante resaltar, que la música viene a ser una parte importante de la película. La escogencia de la misma no esta nominada, pero sí es digna de ser admirada.
Muda, al estilo blanco y negro, El Artista brinda comedia, desesperanza, amor y victoria. Sin olvidar, a un pequeño cachorrito que se ganará el corazón de todos.
